El Gobierno catalán criticó ayer que el Parlamento Europeo haya diferenciado el catalán del valenciano en su campaña de propaganda institucional para las elecciones del 7 de junio. El ex eurodiputado y secretario general de Política Lingüística de la Generalitat de Cataluña,
Bernat Joan, aseguró que la Eurocámara «se podrían haber ahorrado gastos y quebraderos de cabeza».
El Gobierno catalán lamentó, en este sentido, que el
Parlamento Europeo trate el
catalán y el valenciano como
lenguas diferentes y se haya gastado 6.000 euros en la traducción de su anuncio de televisión en el que se anima a votar en las elecciones del 7 de junio.
Algunas voces ligaron la traducción al valenciano de la campaña europea a «presiones» del Consell. Fuentes consultadas por ABC en Bruselas descartaron por completo este extremo y resaltaron de forma contundente que valenciano y catalán «tienen el mismo estatus» en la Unión Europea.
Obligación por ley
El propio responsable de la dirección general de Comunicación de la Eurocámara, Fernando Carbajo, así lo reconoce: «Estamos obligados jurídicamente a hacer esta traducción, aunque sea mínima y sólo haya que cambiar una coma, ya que el Estatuto valenciano dice que su lengua se llama valenciano» y no catalán.
Bernat Joan fue más allá: «si -el Gobierno valenciano- quiere hacer el spot yo no le veo ningún problema; TV3 no tendría ningún inconveniente al emitir una versión valenciana».
El cumplimiento a rajatabla de la traducción de los spots a las lenguas minoritarias ha sido inequívoco por parte del Parlamento Europeo: hay versiones distintas del anuncio en alemán, una para emitir a Alemania y la otra para Austria, en neerlandés, para Holanda y para Flandes, en griego, para Grecia y para Chipre, y en sueco, para Suecia y para Finlandia.
El spot, de treinta segundos de duración, también se ha traducido a otros idiomas oficiales como el vasco y el gallego. Titulado «Tú decides cómo serán las noticias del mañana», en él ciudadanos de varios países presentan las noticias que les gustaría escuchar en los próximos años.
Recientemente se firmó un convenio el Gobierno y el Tribunal de Justicia de la UE por el que los ciudadanos españoles podrán emplear el catalán, el valenciano, el gallego o el vasco para dirigirse a esta institución.